Turismo sostenible: cómo planificar unas vacaciones diferentes

Boomerang es una agencia de viajes argentina que realiza turismo sostenible. Buscan reducir sus emisiones como empresa y en los viajes que planifican.

Viajar es una aventura fantástica. Conocer lugares nuevos, encontrarse con realidades ajenas, intercambiar saberes. Darle un descanso a la rutina diaria. ¿Todo esto puede tener una perspectiva ambiental? Claro que sí y de eso de trata el turismo sostenible.

La Organización Mundial del Turismo define el turismo sostenible como “el turismo que tiene plenamente en cuenta las repercusiones actuales y futuras, económicas, sociales y ambientales para satisfacer las necesidades de los visitantes, de la industria, del entorno y de las comunidades anfitrionas”.

En Boomerang Viajes eso es parte natural del armado turístico. De hecho, para su directora y fundadora, Bettina González, “el turismo es sostenible o no es”. Esto se enmarca dentro de la apuesta de la industria en promover acciones climáticas a nivel mundial para disminuir los efectos de gases invernaderos que genera el sector. Reducir la huella de carbono que provocan los desplazamientos de millones de pasajeros.

Turismo sostenible

Antes de proponer un trayecto a sus clientes, Boomerang viajes busca alternativas de recorridos con el menor número de vuelos aéreos posibles. También ofrece propuestas por rutas locales. También itinerarios a pie. Está dentro de su naturaleza y su espíritu. 

En una declaración encabezada por la Organización Mundial del Turismo de las Naciones Unidas (UNWTO) durante la COP25, más de 450 organizaciones se comprometieron a lograr cero emisiones netas de aquí a 2050 a más tardar. Desde Boomerang Viajes, apuestan a ser carbono neutrales para 2030.

Esta agencia argentina decidió abrazar fuertemente el desafío y la responsabilidad del cambio climático en 2020, cuando se propusieron medir su propia huella de carbono.  La iniciativa ya tenía un precedente en 2019, cuando lograron la certificación de “Empresa B”, siendo la primera de su país (dentro del sector) en tenerla.

como crear un turismo más sostenible

Créditos: Boomerang

Compensar la huella de carbono propia

Hoy en día existen diversas plataformas para medir la huella de carbono, que se traducen en toneladas de CO2. Pero Boomerang fue más allá y creó su propio medidor, con el que calcula el impacto que tienen en el medioambiente todas sus actividades. Todas. Desde la electricidad que utilizan las oficinas de la agencia, hasta el trayecto que realiza un cliente si elige comprar un paquete de viaje. El turismo sostenible exige un contrato a fondo.

Por eso, una vez que la agencia tuvo el reporte de la cantidad de toneladas producidas, optó primero por reducir y luego por compensar. Se puede compensar la huella a través del aporte económico en distintas iniciativas de protección del medioambiente. Pagar por el impacto producido, reinyectando dinero en el cuidado ecológico.

“La medición nos permitió contemplar y visibilizar los objetivos”, señala González. “Al medir, vimos que nosotros impactábamos, entonces fuimos reduciendo en nuestro modo de programar los viajes y paquetes turísticos. Siempre el objetivo es, primero, reducir”, agrega.

¿Dónde destinar el dinero?

Existen muchos proyectos de protección con los cuales colaborar. Boomerang ha establecido una alianza con The Carbon Sink, una de las tantas entidades a nivel mundial que comercializan bonos de financiamiento. A través de esta organización, la agencia contribuye con la iniciativa de Grupo de Manejo Forestal (GMF), que lleva adelante tareas de reforestación en el norte de Argentina.

González explica que no se trata solo de un aporte económico. Que no es “solamente plantar árboles y punto”. Que esta tarea genera toda una cadena de actividad que se pone en marcha. “Es un proyecto integral que tiene una dimensión social”, enfatiza. Involucra comunidades locales, impacta en la economía local, recupera biodiversidad.

Todo eso implica compensar la huella de carbono, dice la directora de la agencia, que acaba de volver de un viaje para comenzar a trabajar con un nuevo proyecto. La idea de ir a conocerlo personalmente tiene una motivación clara: “Queremos conocer a fondo qué significa contribuir al cambio climático”, argumenta.

turismo sostenible

Créditos: Boomerang

Los viajeros también pueden compensar

El compromiso de Boomerang hacia la carbono neutralidad y un turismo sostenible involucra a sus clientes. Ellos pueden, también, compensar sus emisiones GEI. Quien contrata los servicios de la agencia recibe no solo un paquete de viaje, sino también el reporte de lo que ese viaje genera en materia de gases de efecto invernadero.

Boomerang lo calcula con su medidor propio, eso da un resultado, y esa tonelada tiene un precio. Se lo informa al cliente, y éste puede financiar un proyecto ambiental. El que desee. Ya sea el del norte argentino con GMF o en otra parte del mundo. El reporte va acompañado de un link a The Carbon Sink, donde tiene todas las iniciativas disponibles. se trata de un paso tan simple como abonar con la tarjeta de crédito de forma online.

El próximo objetivo es que, para 2025, el 30% de todos sus viajeros incluyan ese valor de compensación dentro del costo del viaje. Es decir: que el cliente lo haga de manera directa y le llegue el certificado de bono. Ya tienen experiencias concretas con algunos de ellos.

Reconvertir la rutina

La acción climática de Boomerang comenzó, como se dice, en casa. Calcularon su huella de carbono evaluando todos los consumos que tenían en las oficinas. González lo recuerda como un cambio fuerte. “Desde lo mínimo hasta lo más grande”, dice. Se midió todo: lo que se gastaba en papel, en tinta, el microondas, el agua. También se procuró cuidar las compras, adoptando una actitud más responsable como consumidor.

“Hasta generar nuestra propia conciencia de cómo llegar al trabajo”, agrega la directora. Incluso, cuando remodelaron las oficinas (en las que ahora también se hace compostaje), se pintaron las paredes de blanco, para ganar en luminosidad natural y no precisar tanto de la electricidad para luz artificial.

González está convencida del cambio. De que la perspectiva ambiental inherente al turismo sostenible que promueven es fundamental. “Es ver más allá”, señala. “Nos abrió un panorama ilimitado”.