¿Cuáles son las actividades económicas del Chaco?

Descubre el bosque chaqueño y sus actividades económicas, cuáles son sostenibles y cuáles no, y las causas de su bajo/alto impacto ambiental.

Hablar del bosque seco continuo más extenso en el mundo es hablar del bosque chaqueño. Actividades económicas allí tienen lugar a lo largo de las diferentes regiones y, en su mayoría, están conectadas con los recursos naturales disponibles. Como en el Chaco conviven poblaciones indígenas y no indígenas, esto marca una diferencia en las actividades productivas. En primera instancia, hay industrias de gran escala que demandan grandes extensiones del territorio. Por esta razón, éstas tienen un mayor impacto. En segunda instancia, hay actividades económicas de menor escala que no generan deterioro del bosque. Sin embargo, éstas solo benefician a un pequeño sector de la población.

¿Cuáles son las actividades económicas más comunes del Gran Chaco?

El Gran Chaco es un vasto ecosistema, que cubre grandes extensiones del norte de Argentina, Bolivia y Paraguay. Por lo tanto, las actividades productivas en la región varían por país. No obstante, las actividades económicas primarias son las más comunes. En otras palabras, en el Gran Chaco, predominan actividades productivas extractivistas o el uso directo de los recursos naturales.

El bosque chaqueño: Actividades económicas en el sector agrícola

En la actualidad, la agricultura es una de las principales actividades económicas en el Gran Chaco, particularmente en el Chaco argentino. Algodón, soja, maíz, maní, tártago, sésamo, cártamo y sorgo hacen parte de la agricultura extensiva. En menor escala, en el Chaco argentino se cultivan cítricos. Sin embargo, es la soja la que ha impulsado la explosiva expansión agrícola en el Gran Chaco durante las últimas décadas.

Cultivo de soja en el Gran Chaco

Foto: Reuters

El aumento del cultivo de soja es el resultado de varios factores. En primer lugar, avances biotecnológicos permitieron su siembra en suelos bajo condiciones como las que se dan en la región chaqueña. En segundo lugar, el valor de la tierra en las provincias del Chaco argentino es menor, comparado con el de otras regiones. Así, el área sembrada en el noreste y noroeste del país aumentó un 417 y un 220 por ciento, respectivamente. Esto es comparando las campañas de los períodos 1997 – 1998 y 2004 – 2005. En contraste, el área sembrada en la Pampa Húmeda solo aumentó un 85 por ciento.

Actualmente, la soja y sus derivados constituyen el principal generador de divisas en la economía argentina. De hecho, este complejo representó el 27 por ciento de las exportaciones argentinas en 2020, que equivalen a USD $14.865 millones. Esto es según datos preliminares publicados por el INDEC.

El bosque chaqueño: Actividades económicas en el sector ganadero

La ganadería bovina es otra de las principales actividades económicas de exportación en el Gran Chaco. Particularmente, Paraguay es el país donde se da la mayor transformación del suelo para esta actividad. Por sus condiciones climáticas, el Chaco paraguayo es la principal zona ganadera del país. De hecho, la industria se cataloga como extensiva, con 8,2 millones de cabezas aproximadamente. Esto es según datos del Censo Agropecuario Nacional 2008.

El Chaco paraguayo corresponde al 60 por ciento del territorio nacional, con una extensión de más de 240.000 kilómetros cuadrados. En hectáreas, esto equivale a 24 millones, y la carga animal promedio en esta región es de 4,6 hectáreas por cabeza de ganado. Consecuentemente, este sector representa entre el 15 y el 20 por ciento de los ingresos por exportaciones. De hecho, el país fue el séptimo en exportaciones de carne a nivel global en 2016. En dicho año, Paraguay exportó 389 mil toneladas de carne a más de 55 países en cuatro continentes.

Bosque chaqueño actividades económicas: Ganadería

Hoy, el mundo produce tres veces más carne que hace 50 años y, en la última década, Paraguay es el país con mayor crecimiento en producción y exportación. Específicamente, el Chaco paraguayo es la región que presenta la mayor parte de la expansión de esta industria. Para 2023, se estima que la producción de carne en Paraguay habrá aumentado un 46 por ciento desde el 2013. Esto es según un estudio de la FAO – OCDE.

El bosque chaqueño: Actividades económicas más comunes en otros sectores

A pesar de que, actualmente, la ganadería y la agricultura son las actividades económicas dominantes en el Gran Chaco, esto no fue siempre así. La primera actividad extractiva a gran escala en esta región fue la explotación forestal. Efectivamente, la creciente demanda de madera dura para múltiples usos y de tanino para curtir cueros impulsó la expansión de esta industria en el Chaco.

La explotación de quebracho

Por consiguiente, para 1940, una sola empresa taninera consumía 400 mil toneladas de rollizos de madera al año. A mediados de esta década, toda la industria taninera desmontó alrededor de 30 millones de árboles, equivalentes a 2,5 millones de hectáreas. De esta manera, la actividad llegó a alcanzar altos niveles de intensidad, y se centró principalmente en la explotación de quebracho, que es abundante en el Chaco. De hecho, solo en Santiago del Estero, Argentina, se cortaron 200 millones de árboles de quebracho colorado y blanco durante la primera mitad del siglo XX. No obstante, hoy no quedan muchas fábricas tanineras en el Chaco, y la práctica se ha convertido en una actividad económica menor.

Las actividades de los pueblos originarios y su presencia en el Chaco argentino, el Chaco boliviano y el Chaco paraguayo

Mujer participando en actividades económicas de pueblos originarios del Chaco

Foto: Marco Del Comune

En el Chaco también habitan comunidades indígenas o pueblos originarios. Un total de 40 mil indígenas viven en el Chaco paraguayo y 75 mil más en el Chaco boliviano. Por su parte, El Chaco argentino tiene la mayor cantidad de población indígena con 200 mil habitantes. Estas comunidades también están asociadas a actividades económicas en la región. La pesca, pequeños emprendimientos agrícolas, la caza, las artesanías y la mano de obra son algunas de sus actividades de sustento. Además, algunas de estas comunidades comercializan miel. Entre asociados y familias pueden llegar a trabajar hasta 500 hectáreas de bosque para producirla.

¿Qué actividades económicas de la región chaqueña son sostenibles?

Naturalmente, las actividades económicas y de sustento de los pueblos originarios en el Chaco se caracterizan por ser sostenibles. En gran medida, esto se debe a que éstas no se desarrollan a una escala industrial. Si bien, la economía nace de los recursos del bosque, el nivel de explotación da lugar a procesos de resiliencia y recuperación. De hecho, las comunidades indígenas chaqueñas tienen un origen nómada. Por ejemplo, cuando los animales de sus cazaderos empezaban a escasear, las tribus cazadoras se movían a otros territorios y regresaban cuando las zonas estuvieran repobladas.

En la producción de miel, muchas familias del Chaco también han encontrado una actividad productiva que no altera el bosque. Por el contrario, el incremento de esta actividad ha representado que algarrobos y otros árboles – hogar de las abejas – permanezcan en pie. Sin embargo, estas actividades no generan el mismo dinamismo económico que las de escala industrial. Verbigracia, Argentina y Paraguay son grandes productores de alimento para el mundo. Por lo tanto, los ingresos por agricultura y ganadería industrial son fundamentales en la economía de ambos países.

producción de carne y las actividades económicas del Chaco

¿Qué actividades económicas del Chaco son nocivas?

Cinco prácticas asociadas con actividades económicas en el bosque chaqueño representan la mayor amenaza para la región. Esto es de acuerdo con el Manual para la Gestión Sustentable de Tierras y Bosques del Gran Chaco Americano 2017:

  • Deforestación para producir madera y carbón vegetal y cambio del uso de la tierra para la producción agrícola
  • Degradación de pasturas debido a prácticas de manejo inadecuadas
  • Incendios
  • Excesiva dependencia de la producción ganadera y la explotación forestal
  • Gestión no sostenible de los recursos hídricos

Es un hecho que el potencial productivo del Gran Chaco es elevado. No obstante, el desarrollo económico de los países que lo constituyen está asociado con el uso extensivo de los recursos naturales. Actualmente, el Gran Chaco hace parte de las regiones con mayor deforestación en el mundo. Como consecuencia, esta importante región boscosa de Suramérica sufre graves problemas de deterioro ambiental. Además, la situación se agrava teniendo en cuenta las causas y efectos actuales del cambio climático.

El bosque chaqueño: Actividades económicas dejan menos árboles en pie ¿Cuáles son las consecuencias?

En el Gran Chaco, menos bosques significa menos capacidad para amortiguar las temperaturas extremas que se dan allí. En ocasiones, éstas pueden llegar a alcanzar hasta 50ºC en las regiones más áridas. Por otro lado, los bosques ayudan a mantener el régimen hídrico y a estabilizar los frágiles suelos chaqueños. Esto es esencial, considerando que se perciben cambios en la precipitación de la región, con sequías e inundaciones más frecuentes y severas.

Gran Chaco

Foto: Emiliano Lasalvia

Adicionalmente, el desmonte de bosques contribuye a más emisiones, liberando las cantidades de carbono que la vegetación y el suelo han ayudado a absorber. De hecho, el bosque chaqueño tiene 170 toneladas de materia orgánica por hectárea, de las cuales el 50 por ciento corresponde a carbono. En otras palabras, al deforestar se cambia la funcionalidad del bosque, pasando de esponja de carbono a fuente de emisiones. Como resultado, la deforestación representa el 23 por ciento de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero actualmente. A pesar de esto, el Gran Chaco ha sufrido una pérdida neta de bosque – balance entre área deforestada y área regenerada – de 8,7 millones de hectáreas entre 2000 y 2019.

Tanto la capacidad de producir alimento como el desarrollo económico son aspectos vitales para un país. Ciertamente, las actividades productivas del bosque chaqueño representan sustento y progreso para muchas familias. Sin embargo, el ritmo de pérdida de bosque y la degradación del suelo, así como los efectos del cambio climático – a los que esta práctica contribuye – amenazan el futuro de dichas actividades económicas en la región. Por lo tanto, resulta urgente repensar las formas de producción actuales en pro del bosque, como fuente de bienestar y prosperidad.

Lea más sobre las repercusiones de la deforestación en el parque chaqueño aquí.