¿Cómo afecta la deforestación a nivel mundial?

La deforestación a nivel mundial tiene efectos directos sobre el planeta, y es mucho más grave de lo que se piensa.

La deforestación a nivel mundial tiene un alto impacto y se da por diferentes causas. En países como Indonesia, se talan extensas áreas de bosque para el cultivo de palma y la producción de madera y papel. Particularmente, el aceite de palma es un ingrediente versátil que se utiliza principalmente en productos alimenticios y de aseo.

En otros países, como Brasil, Argentina y Paraguay, uno de los principales impulsores del desmonte es la conversión del suelo en pasturas para la ganadería. América Latina es una región donde la producción de soja es otro motor importante de la deforestación. De hecho, vastas áreas de bosque son erradicadas para producir esta leguminosa, y el 80 por ciento de la producción se destina a la alimentación de ganado que más tarde se convierte en carne para consumo humano.

Es así como la deforestación a nivel mundial está estrechamente ligada a la producción de alimento y otros commodities. Naturalmente, esto es esencial para la subsistencia humana. Sin embargo, la velocidad a la que el planeta está perdiendo cobertura forestal, especialmente bosques tropicales, puede acarrear un alto costo para la sociedad. Alrededor de 65 millones de hectáreas es el saldo de deforestación de bosque húmedo primario a nivel mundial entre 2002 y 2020. Si se suma la pérdida total de cobertura forestal en el planeta, el total es de 398 millones de hectáreas desmontadas en este período. Esto es equivalente a un área similar a toda la India.

¿Cuál es el impacto de la deforestación a nivel mundial?

Cambio climático

Los bosques sanos absorben CO2 de la atmósfera, y actúan como valiosos sumideros de carbono. Sin embargo, en las áreas deforestadas, esta capacidad está revertida. Lo que permite que se libere a la atmósfera una mayor cantidad de gases de efecto invernadero. A esto se añade, que las áreas de bosque deforestadas liberan el carbono almacenado, contribuyendo a más emisiones.

Por ejemplo, Brasil es uno de los focos de deforestación intensiva en el mundo. Consecuentemente, sus emisiones por agricultura, cambio de uso de la tierra y silvicultura son más intensas que las emitidas por sectores como transporte y electricidad. De hecho, en 2018, las emisiones de gases de efecto invernadero en Brasil provenientes de la agricultura, del cambio de uso de la tierra y de la silvicultura totalizaron alrededor de 884 millones de toneladas de CO2e. El sector transporte, el siguiente más intenso en emisiones, dejó un saldo de aproximadamente 192 millones de toneladas de CO2e en dicho año.

Pérdida de hábitat

La pérdida de hábitat es uno de los efectos más peligrosos y devastadores de la deforestación. El 70 por ciento de las especies de animales y plantas terrestres viven en los bosques. Es por eso que la pérdida de hábitat impacta su supervivencia. Incluso, se la identifica como la amenaza principal para el 85 por ciento de todas las especies en peligro de extinción. Esto es según la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN por sus siglas en inglés).

Sumado a esto, los árboles de selvas tropicales brindan refugio a algunas especies y el dosel que regula la temperatura. La deforestación deja como resultado variaciones más drásticas de temperatura, lo que puede resultar fatal para muchas especies. Las grandes extensiones de selva tropical taladas en África, Latinoamérica y Asia, amenazan a orangutanes, tigres, elefantes, rinocerontes, entre otros.

fauna afectada por deforestación

Créditos: Kiyoshi – Unsplash

Regulación de los ciclos del agua

Los árboles también ayudan a controlar el nivel hídrico en la atmósfera, contribuyendo a la regulación del ciclo del agua. Incluso, científicos consideran que el Amazonas, el bosque tropical más grande del mundo, tiene influencia sobre ciclos hídricos en todo el planeta. Es así como en áreas deforestadas, hay menos agua en el aire para regresar al suelo. Eso contribuye a que éste se seque y anula la posibilidad de cultivar.

¿Cuántos millones de hectáreas de bosques se pierden al año en el Amazonas?

Cerca de un millón de kilómetros cuadrados de selva amazónica han sido destruidos en Brasil, Perú, Colombia, Bolivia, Venezuela, Surinam, Guyana y la Guayana Francesa. Esto es partiendo desde 1978, lo que representa alrededor de 23 mil kilómetros cuadrados talados cada año hasta el 2021. Desmontar la selva amazónica afecta el ciclo del agua en esta región, pero también genera consecuencias globales.

Erosión del suelo e inundaciones

Los árboles ayudan a la tierra a retener agua y preservar la capa superior del suelo. Esto proporciona nutrientes esenciales para el bosque y la vida que éste sustenta. Por consiguiente, la deforestación tiene entre sus efectos a la erosión del suelo. Entre otros, esto hace que los agricultores tengan que trasladarse a otras regiones, perpetuando la tala. La tierra estéril que queda tras actividades agrícolas intensivas es más susceptible a las inundaciones, particularmente en regiones costeras.

Tanto como la mitad de la capa superior del suelo en el mundo ya ha sufrido deterioro por la deforestación. Esto es según análisis del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF por sus siglas en inglés). Así mismo, la enorme pérdida de área forestal ha llevado, sin duda, a un aumento significativo en la erosión del suelo.

Erosión por deforestación a nivel mundial

Créditos: Francesco Ungaro – Pexels

Deforestación a nivel mundial pone a comunidades indígenas en situación de vulnerabilidad

Las comunidades indígenas que viven en los bosques y dependen de ellos para su sustento también están amenazadas por la deforestación. La pérdida de cobertura forestal tiene un efecto inmediato y directo en su estilo de vida. Sin embargo, los gobiernos de naciones con selvas tropicales en sus territorios intentan desalojar a las tribus indígenas constantemente. En otras ocasiones, áreas de los bosques que les han sido reconocidos como suyos son igualmente desmontados.

En América Latina, cientos de líderes comunitarios han sido asesinados a causa de las disputas por la tierra en los últimos años. Sus reclamos por los derechos sobre el territorio se han vuelto cada vez más visibles. Esto ha generado una creciente persecución, racismo y asesinatos. No obstante, estas comunidades han demostrado ser los mejores protectores de los bosques.

Entre 2000 y 2016, en América Latina y el Caribe, el área de bosque intacto disminuyó solo un cinco por ciento en los suelos indígenas. En contraste, la disminución en las áreas no indígenas fue de un 11 por ciento. Esto es según un reporte de la Organización para la Alimentación y la Agricultura de las Naciones Unidas (FAO por sus siglas en inglés). Allí, se convoca a reconocer los derechos de los indígenas sobre el territorio, entre otros, para dar una ventana de oportunidad a la sociedad en materia de cambio climático.

¿Cuáles son los países con mayor deforestación en el mundo?

La mayoría de los bosques que se destruyen hoy se encuentran en regiones tropicales. Estas regiones están entre las zonas con mayor biodiversidad en el planeta. Algunos países donde la deforestación se acentuó en los últimos 30 años son Brasil, Indonesia, República Democrática del Congo, Malasia. A esta lista se suman Madagascar, Colombia, Ecuador, Papua Nueva Guinea, Zambia, Laos y Cambodia.

Países con deforestación

La mayor parte de la destrucción de los bosques tropicales se debe a los consumidores de la región. No obstante, la demanda de países ricos es responsable por alrededor del 12 por ciento de la deforestación en los trópicos. Por ejemplo, los consumidores de carne de todo el mundo contribuyen a la destrucción de la selva amazónica, entre otros.

¿Cómo se puede frenar la pérdida de bosques?

El fin de la deforestación es posible. Muchos países han puesto fin a la tala de árboles e incluso lograron la expansión de sus bosques. La tasa de deforestación más alta se registró en la década de 1980. Desde entonces, este índice ha reducido significativamente. Si lográramos disminuir aún más la demanda de madera y tierras agrícolas, pondríamos fin a la deforestación en los trópicos.

Detener la deforestación a nivel mundial sería un gran paso para la protección de la biodiversidad del planeta. Además, se pondría fin a las emisiones de gases de efecto invernadero por deforestación. Los bosques, en su proceso de expansión, absorberían más carbono de la atmósfera.

Los humanos no pueden sobrevivir sin proteger los bosques y la naturaleza. Estos ecosistemas almacenan y absorben carbono, y brindan medios de subsistencia a miles de personas. A esto se añade que brindan suelo y agua fértiles y actúan como escudos naturales contra las enfermedades. La relación entre el bienestar de la sociedad y los bosques es tan estrecha que no protegerlos parece una decisión en contra de la humanidad misma.

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