Vaca Muerta: Yacimiento petrolífero

¿Es Vaca Muerta un yacimiento petrolífero? Un yacimiento petrolífero se define como el lugar donde se acumula un hidrocarburo, gas o petróleo, de forma natural. Si bien Vaca Muerta cumple con esta definición, al ser una reserva no convencional de gas y petróleo, no se lo puede considerar un yacimiento tradicional.

¿Qué es un yacimiento petrolífero no convencional?

Los yacimientos no convencionales, a diferencia de los convencionales, son aquellos donde los hidrocarburos no están almacenados en las conocidas trampas de gas y petróleo, sino en formaciones rocosas muy compactas. En el caso de los yacimientos convencionales, las trampas se generan cuando rocas con alta porosidad y permeabilidad permiten que los hidrocarburos fluyan y se acumulen en el subsuelo. Todos los otros tipos de yacimiento fuera de esta categoría, son catalogados como no convencionales.

Reservas de petróleo y gas natural en las rocas shale

Vaca Muerta es un extenso reservorio no convencional conformado por roca madre – o shale – donde las condiciones de baja porosidad y permeabilidad encierran el gas y el petróleo en espacios microscópicos no conectados entre si.

Para que los hidrocarburos se desplacen de forma natural hacia la superficie y se acumulen en trampas, se requiere de fisuras producidas por movimientos en la corteza terrestre. De hecho, actualmente la industria hidrocarburífera utiliza el fracking para provocar estas fisuras y realizar la extracción.

A través de la inyección de agua a alta presión, el fracking genera un (o varios) canales de alta permeabilidad.

Reservas de gas natural técnicamente recuperables de Vaca Muerta ¿Cómo entenderlas?

No es nuevo que Vaca Muerta forme parte de los yacimientos no convencionales más grandes del mundo. ¿Pero cómo se calculan las reservas extraíbles de esta formación de shale? Los métodos son el cálculo de lo técnicamente recuperable por un lado y lo económicamente viable por el otro.

Las reservas técnicamente recuperables son el petróleo y gas que pueden producirse con la tecnología disponible, independientemente del precio del mercado y los costos de producción. Por el contrario, las reservas económicamente extraíbles sí incluyen las condiciones del mercado y se basan en la viabilidad financiera de la extracción de hidrocarburos.

En general, en materia de yacimientos no convencionales, la estimación de reservas es aún un ejercicio problemático. Aún así, la situación actual de la industria hidrocarburífera en Vaca Muerta puede entenderse a partir de la diferenciación mencionada anteriormente.

Viabilidad económica: La barrera de la industria no convencional en Argentina

Contrario a lo que sucede en Estados Unidos, en Argentina aún no se logra desarrollar una adecuada ecuación económica para la explotación de yacimientos petrolíferos no convencionales. Esto se debe a los altos costos de este tipo de producción.

El fracking en yacimientos petrolíferos globales

A escala global, el avance tecnológico de la técnica del fracking va en ascenso, pero el conocimiento acumulado es todavía bajo y principalmente está basado en la geología estadounidense.

En Argentina, la técnica requiere ajustes y adaptaciones acordes con las características específicas de Vaca Muerta. Sin embargo, aún no existen las condiciones necesarias para que este desarrollo de la industria sea liderado localmente.

Además, la posibilidad de alcanzar un pico en la demanda de petróleo y la baja en los precios, aumenta el riesgo de que las grandes inversiones en infraestructura para combustibles fósiles se conviertan en activos varados.

La estrategia de subsidiar la producción en yacimientos petrolíferos

Vaca Muerta tiene volúmenes de 34 billones de metros cúbicos de gas y 270.000 millones de barriles de petróleo (mbp). De estos, alrededor de 8,7 billones de metros cúbicos y 16.000 millones de barriles son técnicamente recuperables.

Pero el petróleo de este yacimiento se produce en un mercado de precios alterados por el Gobierno. Es decir, los efectos del mercado global son mitigados a través de subsidios a los productores locales, mediante la compra del barril a un valor mayor. Esto significa que si el precio del petróleo cae, la industria del fracking no es rentable, por lo que los subsidios del Gobierno aumentan.

La empresa petrolífera con mayor producción

La historia con el gas no es diferente. Su producción también es subsidiada, pues el costo del gas de Vaca Muerta no es competitivo con el mercado global. El Gobierno, entonces, asume la diferencia con respecto a una tarifa base que varía con cada gobernante y esto no ofrece estabilidad.

Actualmente, la tarifa es de USD $3,66 por millón de BTU para YPF, empresa encargada de producir los mayores volúmenes mensuales hasta 2024.

Si no es viable explotar el yacimiento petrolífero Vaca Muerta, ¿Cuál es la alternativa?

Argentina concentra sus esfuerzos en la producción hidrocarburífera interna principalmente por dos razones. La primera es autoabastecerse para reducir las importaciones y evitar la salida de divisas y, en segundo lugar, para exportar y aumentar la entrada de las mismas. El país necesita restablecer la economía.

Los petrolíferos y la presión económica

Pero mientras se teme que los yacimientos no puedan explotarse en su totalidad, el avance en los actuales proyectos de energía renovable ofrecen una alternativa para generar independencia energética. Hoy, la energía de fuentes eólicas y solares es la más barata –sin subsidios– y con sustentabilidad ambiental.

De esta forma se presenta un escenario más positivo, donde en lugar de seguir financiando yacimientos petrolíferos con subsidios que aumentan la carga de la deuda fiscal, el Gobierno argentino acelera su transición hacia energías renovables no contaminantes para dinamizar la economía.