Una cooperativa social argentina recicla residuos electrónicos

En el mundo se generan 50 millones de toneladas de residuos electrónicos por año. TecnoRAEE es una cooperativa social argentina que trabaja para reciclarlos.

TecnoRAEE encontró una respuesta ambiental para un problema social. Pionera en su rubro en la provincia de Buenos Aires, Argentina, abrió camino para enfrentar la falta de acceso a la tecnología en sectores poblacionales carenciados y terminó por sumarse a la lucha para combatir las más de 50 millones de toneladas de residuos electrónicos que se generan en el mundo por año.

En TecnoRAEE reciclan aparatos electrónicos en desuso. Su nombre lo explica: RAEE es la sigla que se utiliza para referirse a los Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos. Conformada por unos 20 trabajadores, esta cooperativa social nació en plena pandemia y se volvió un eslabón fundamental de la economía circular.

Gracias a ese trabajo, vuelven a darle vida a un sinfín de aparatos que fácilmente podrían terminar en la basura. Así, ofrecen una solución a una problemática muy propia de estos tiempos.

RAEE, la “basura del futuro”

Los avances tecnológicos de la humanidad posibilitan la creación constante y vertiginosa de cientos de dispositivos eléctricos y electrónicos que conviven con una lógica lineal y de un solo uso. Su obsolescencia suele llegar más pronto que tarde y, dado que resulta muy fácil reemplazarlos, el ciclo de vida tiende a ser breve.

Gonzalo Pérez, uno de los fundadores de TecnoRAEE, le llama basura del futuro. “Pensemos en el consumo diario que tiene cada ser humano. Un celular, una TV, un equipo de música, un secarropa, un lavarropa, un horno eléctrico, lo que sea. Eso es el consumo de cada ser humano dentro de un domicilio o de una familia tipo. Si lo multiplicas por millones, es la basura del futuro”, dice.

“¿A dónde va a terminar toda esa basura cuando se rompe?”, se pregunta. “Ya no hay más técnicos hoy en día que reparen esas cosas, ya no hay más lugares donde uno lleve a repararlas. Si se rompe algo, lo dejas adentro de tu casa o en un galpón. O en la calle, pero no hay un recolector de residuos electrónicos que lo retire”, grafica.

Para Pérez, sin embargo, en un futuro sí que lo habrá. “Que pasen a recogerlo como recogen la basura de tu casa diariamente. Va a pasar eso”, confía.

residuos electrónicos

Créditos: TecnoRAEE

TecnoRAEE y la segunda vida de los residuos electrónicos

Mientras tanto, cooperativas como esta hacen su trabajo de manera silenciosa y sostenida. Con la correspondiente habilitación del gobierno local que les permite manipular los residuos, recibe chatarra de todo tipo (excepto baterías, tubos fluorescentes, pilas, tóner y otros elementos contaminantes) en su planta de tratamiento en las afueras de Buenos Aires.

Cuentan con una sólida logística a través de la cual recolectan RAEE de empresas y particulares. Celulares, refrigeradores, TV; aluminio, cobre, bronce. La cantidad y la variedad de elementos que trabajan es muy grande.

En la planta cuentan con una zona de desarme general y otra zona de refuncionalización. Hay residuos que pueden ser restaurados, y otros que no y van a parar al reciclaje.

Refacción y donación de computadoras

El producto “estrella” es la computadora. De hecho, es lo que motorizó la creación de la cooperativa: la imposibilidad de acceso a computadoras de población vulnerable. Es así que TecnoRAEE recibe computadoras que intenta refuncionalizar y luego dona a escuelas, centro de pensionados o personas de bajos recursos.

Las donaciones las hace en la misma planta. Allí la cooperativa invita a los destinatarios a retirarlas, pero también invita a aquellas empresas o particulares para quienes, en algún momento, esas computadoras fueron basura.

RAEE, una oportunidad de desarrollo personal y reinserción social

Hay un porcentaje de aparatos reciclados que es vendido. Esa venta representa un ingreso para los trabajadores de la cooperativa, cuyo valor excede lo meramente económico. Sus integrantes, hombres, mujeres, son personas que estuvieron privadas de su libertad o en condición de encierro.

Salir de la prisión y reinsertarse en la sociedad con antecedentes penales a cuestas es, muchas veces, un espinoso camino en donde las puertas de las oportunidades se cierran con frecuencia.

Frente a ese panorama, TecnoRAEE busca ser una alternativa. Tal es así que, a través de un programa en conjunto con el gobierno local, ofrece capacitaciones a las personas en prisión para que, una vez terminen su condena, cuando salgan puedan incorporarse a la planta de procesamiento de residuos.

“Tratamos de enseñarles lo que es el reciclado electrónico, y en base a eso sacamos un montón de técnicos y recicladores. Les damos trabajo cuando salen”, señala Pérez.

los residuos electrónicos pieden ser reciclados

Créditos: TecnoRAEE

Residuos eléctricos y electrónicos, una problemática de 50 millones de toneladas

Según explican distintas entidades, estos tipos de desechos representan una preocupación significativa a nivel mundial. No solo por la contaminación ambiental, sino también por su afectación a la salud humana.

La ONU seña que, según se estima, las más 50 millones de toneladas que terminan en la basura de forma anual podría duplicarse de aquí a 2050 si no se toman medidas eficaces.

La Organización Mundial de la Salud, por su parte, explica que “los habitantes de los países de ingresos medianos y bajos, en especial los niños, son los que más expuestos están a los riesgos que entrañan estos desechos debido a la falta de normativas, infraestructuras de reciclado y formación apropiadas”.

“Por el momento solamente se recicla el 17% de este tipo de desechos”, agrega la ONU. En ese 17% está TecnoRAEE.